El Monasterio de Santa María de Burgohondo en la Edad Media
En el año 2001 José Antonio Calvo Gómez publicó un pequeño libro titulado La abadía de Burgohondo en que describía la iglesia, la torre, el claustro y la finca del monasterio de Santa María destacando los valores arquitectónicos de un conjunto que poco tiempo atrás, en 1983, había sido declarado monumento nacional. En su introducción el profesor Ángel Barrios decía de aquel libro que era «un acercamiento estético a la fábrica de dicha iglesia y una lectura crítica de alguna de sus partes», clamaba por la carencia de estudios que pudieran dar explicación de cómo aquel viejo monasterio se había convertido en el eje vertebrador de la vida y la actividad social del Alto Valle del Alberche a lo largo de la historia y animaba al autor a emprender una investigación de más calado que fuera capaz de dar respuesta a la gran cantidad de interrogantes que aquel monasterio planteaba a la historiografía.